En esta ocasión te compartimos el impacto de la pandemia, durante el 2021, en la participación laboral femenina en Chile, para conocer el escenario al que nos enfrentamos en este 2022.
La pandemia por COVID-19 tuvo una serie de consecuencias en nuestra vida diaria, además de las sanitarias. Y si bien en Chile durante el 2021 volvimos de a poco a una cotidianeidad menos impactada por el confinamiento, las consecuencias siguen vigentes en diversas áreas.
Una de estas es la participación laboral femenina. Área por la que durante décadas se ha trabajado por aumentar y estabilizar. Analizando y enfrentando las diversas barreras que deben enfrentar las mujeres en este sector, a pesar de que esta práctica beneficia a toda la sociedad. Ya que la participación laboral femenina es un área sumamente importante ya que esta impacta directamente en el crecimiento económico de cada país.
Pero además esta tiene consecuencias relevantes en la vida de las mujeres y cómo enfrentan las opresiones que viven solo por ser mujeres. Y es que la Organización internacional del Trabajo (OIT) y el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) ya mencionaban en el 2009 la importancia de la participación laboral femenina.
Destacando que esta aumenta la autonomía de las mujeres, la satisfacción con sus vidas y la mejora en la negociación familiar. Por lo mismo, conocer el contexto de la participación laboral femenina en Chile es esencial para saber a qué nos enfrentamos para trabajar en este año.
Contexto en Chile frente a este año 2022
Hacia finales del 2021 las tasas de participación y ocupación laboral de mujeres se situaron en 48,1% y 44,5%. Significando un aumento en comparación al año 2020, que fue de 45,3% y 40,3%, según el Instituto Nacional de Estadísticas (INE). Lo que se traduce en que la tasa de desocupación de mujeres tuvo una reducción de 4,0%, según la misma entidad.
Este aumento se entiende considerando que Chile, con el proceso de vacunación, flexibilizó las medidas de confinamiento, aumentando así las posibilidades de recuperación laboral.
En otras cifras encontramos que, según CADEM y Fundación Todas, el 60% de las mujeres se consideran jefas de hogar. Pero solo el 48% de ellas son las principales sostenedoras del hogar. Lo que nos hace preguntarnos cuál es el estado de las remuneraciones salariales que reciben las mujeres.
Sobre esta situación nos podemos encontrar con brechas salariales que afectan diversos estamentos dentro de las organizaciones. Según el MinMujeryEG y Chile Mujeres, las mujeres en el nivel ejecutivo ganan 10,9% menos que los hombres en el mismo puesto. En este mismo contexto, las mujeres en el nivel administrativo y medio ganan 10,2% menos que sus pares hombres.
Estas son brechas persistentes. A pesar de que, según el Ranking IMAD 2021, las mujeres forman parte del 56% de la fuerza laboral en el sector de finanzas, el 26% en el sector industrial, y el 43% en el sector de retail, consumo y alimentos.
Y es que las mujeres constituyen una importante parte tanto en la población mundial como en la laboral. A pesar de ello son las primeras que deben ceder sus trabajos ante las responsabilidades del hogar. Así como también son las primeras en ser desfavorecidas por brechas salariales, y son quienes siguen siendo subrepresentadas en directorios de diversas organizaciones.
Desde LideraMujer nos comprometemos con trabajar en enfrentar esta realidad desde nuestra experticia. Ya que incorporar la perspectiva de género en las organizaciones, sensibilizar sobre esta y gestionar el cambio organizacional para incorporarla, es fundamental para aportar desde nuestros equipos.
