Durante este mes conmemoramos la eliminación de la violencia contra la mujer en todas sus formas y en todos los espacios donde tiene lugar. Solo por el hecho de ser mujeres, se sufren diversas violencias en el ámbito doméstico y público. Estos abusos se reproducen a nivel físico, sexual, psicológico, económico, cultural y racial y en casi todos los aspectos de la vida de una mujer. 

Se enmarca dentro del concepto de violencia de género, la cual se refiere a los actos dañinos en contra de una persona o grupo a causa de su género. Corresponde a una diferencia estructural de poder, donde además de mujeres y niñas, la población LGBTQI+ en general, se ven vulnerades en distintos niveles.

En la resolución 54/134 de la Asamblea General de las Naciones Unidas se indica que la violencia contra la mujer es “todo acto basado en la pertenencia al sexo femenino que tenga o pueda tener como resultado un daño o sufrimiento físico, sexual o psicológico para la mujer, así como las amenazas de tales actos, la coacción o la privación arbitraria de la libertad, tanto si se producen en la vida pública como en la vida privada”. 

La mayor parte de esta es perpetrada por parejas hombres y alrededor de 1 de cada 3 mujeres, ha sufrido algún tipo de violencia física o sexual por parte de sus parejas, de acuerdo a informe publicado por ONU Mujeres.

La violencia machista también se manifiesta en formas sutiles que suelen ser los pasos previos a la agresión explícita y el femicidio. Por este motivo, es muy importante saber detectar la violencia de género en todas sus formas. 

El femicidio, es el asesinato de una mujer en razón de su género. Este nivel de violencia ocurre alimentado por diversos tipos de maltrato como la agresión física, el abuso sexual, gritos y amenazas, sin embargo también se ampara en las microviolencias a las que a diario se expone a una mujer. 

En Chile hasta el 25 de noviembre de 2022, se han registrado 35 femicidios consumados y 143 femicidios. Mientras que 2 de cada 5 mujeres –el 41,4%- entre 15 y 65 años, señalan que han sido víctimas de violencia alguna vez en su vida, según los resultados de la Encuesta de Violencia contra la Mujer en el Ámbito de Violencia Intrafamiliar y en Otros Espacios 2020 (ENVIF-VCM).

Identificar la violencia simbólica

En este contexto, uno de los maltratos más comunes y difundidos socialmente, es la violencia simbólica; una base invisible y naturalizada de la violencia de género. Se expresa en prácticas, discursos y estereotipos que se reproducen cotidianamente. Es difícil de distinguir ya que está inmersa culturalmente, sin embargo se hace visible, pues intenciona  desigualdad y discriminación en las relaciones sociales, subordinando a la mujer en la sociedad.

El concepto del sociólogo Pierre Bourdieu alude al poder ejercido por unas personas sobre otras. El sometimiento de algunos se produce a través del proceso de socialización, donde las relaciones de poder se naturalizan volviéndose incuestionables. La violencia simbólica nace de estas asimetrías y se encuentra instaurada en el sentido común, expresándose  por medio de patrones estereotipados, mensajes, valores, íconos o signos. 

Además de ejemplos en nuestras vidas cotidianas, los medios de comunicación son un espacio donde se reproducen estos discursos. Encontramos violencias en los noticieros al referirse a las víctimas de una situación de maltrato o femicidio como provocadoras de su agresión. Por otro lado, se imponen cánones físicos; nuestros cuerpos no son lo suficientemente buenos: uno de los más comunes es la promoción de la pérdida de peso. 

Estos mensajes se interiorizan y se asumen los roles de género. Es importante reflexionar sobre ello y buscar comunicarnos sin vulnerar a las personas, ya que estas ideas que subordinan a la mujer, son una forma de violencia. 

En Chile se ha implementado la Actualización del Plan Nacional de Acción Contra la Violencia hacia las Mujeres 2018-2030que busca ser un instrumento articulador entre la acción conjunta del Estado y de la sociedad civil. Su objetivo es “articular e implementar acciones intersectoriales y participativas para entregar una respuesta integral y de calidad que promueva el derecho a una vida libre de violencias para todas las mujeres” (Ministerio de la Mujer y la Equidad de Género). También, a través de la campaña: “Sí es mi problema”, se interpela a todes a involucrarse, informarse y actuar contra la violencia hacia las mujeres.

Por otra parte, existen numerosas agrupaciones feministas que velan por la aplicación de la perspectiva de género y los derechos humanos en distintas áreas. Hay grupos de profesionales que de manera interdisciplinaria trabajan por disminuir las brechas y entregar un espacio a las mujeres más vulneradas. 

En este contexto, hoy 25 de noviembre se busca hacer visible la violencia en todas sus formas, es una instancia para informar y hacernos sensibles a las asimetrías que se manifiestan en las agresiones explicitas y también en las más sutiles. 

El Día Internacional de la Violencia Contra las Mujeres se estableció en el Primer Encuentro Feminista Latinoamericano y del Caribe de 1981, en memoria de las hermanas Mirabal de República Dominicana: PatriaMinerva y María Teresa, asesinadas por ser opositoras a la dictadura de Rafael Leónidas Trujillo, quien ordenó sus muertes en 1960. En esta conmemoración celebramos su activismo y también denunciamos la violencia que aún persiste contra las mujeres. 

En caso de ser testigo de violencia:

Puedes llamar gratuitamente al 1455[+] para pedir orientación. Si presencias un episodio de violencia y la vida de una mujer puede estar en riesgo, llama a Carabineros al 149 o al 133 o a la PDI al 134.

“Si eres familiar o parte del entorno cercano a la víctima, es importante que la contengas y acompañes para que se sientas más protegida”. (Ministerio de la Mujer y la Equidad de Género).