A días del aniversario del voto femenino en Chile es vital recordar la importancia de este y velar por el no retroceso de estos avances para el bienestar de las democracias.

Este 8 de enero se cumplen 73 años desde que Chile firmó la ley N° 9.292, que validaba el derecho a voto de las mujeres en elecciones presidenciales y parlamentarias. En Perú este derecho se consiguió el 7 de septiembre de 1955, y en la mayoría de otros países de Latinoamérica fue en épocas similares.

Para Chile en 2021 las mujeres habían participado en solo 10 elecciones presidenciales, donde se puede identificar al menos dos hitos. Uno de ellos es que entre 1990 y 2008, según el Observatorio Electoral de la Universidad Diego Portales, la mayor cantidad de inscripciones de votantes fue en 2005. En ese momento el voto aún era obligatorio y llegó a 8.220.897 inscripciones. Año que coincide con la primera vez en la historia de Chile que se elige a una mujer como Presidenta de la República.

Por otra parte, precisamente en 2021, se dio otro caso bastante relevante que apunta a las votaciones del presidente electo, Gabriel Boric Font. Ya que, según la plataforma Decide Chile, 68% de las mujeres de menos de 30 años que fueron a votar en segunda vuelta lo hicieron por Boric.

Cifra relevante ya que en esta votación el presidente electo se enfrentaba a un candidato de ultraderecha. El cual relativizó mucho de los derechos de las mujeres e incluso propuso eliminar el Ministerio de la Mujer y la Equidad de Género. Lo que se suma a cuando el diputado, de su entonces partido político (Partido Republicano), Johannes Kaiser cuestionó si el derecho a voto de las mujeres era “buena idea”.

Ante esta situación de riesgo es entendible que gran parte de la mujeres votara por la menor amenaza para ellas. Lo que evidencia también lo importante de que las mujeres participen en estos espacios de decisiones. En contraposición a lo que pasaría si solo otros ciudadanos pudieran votar por ellas y poner en jaque sus derechos y necesidades.

Esta misma necesidad de decisión se extrapola a otras áreas de la vida. La necesidad del poder de decisión de las mujeres para con su propia vida es esencial para que la puedan desarrollar de forma digna. Por lo mismo, fechas como la conmemoración del voto femenino es ideal para relevar la importancia de ello.

La importancia de la  toma de decisiones para las mujeres

Si bien ser mujer no garantiza contar con perspectiva de género, es importante de que ellas incidan en las decisiones políticas. 

No delegar a otros las decisiones vitales es esencial cuando recordamos que por siglos se privó a las mujeres el poder de tomar estas decisiones. Ya que estas garantías son bases para que se les considere la toma de decisiones en otros ámbitos.

Si en organizaciones y/o grupos específicos aún no se le da autonomía e importancia a la opinión y decisiones de las mujeres, tener la lucha por el voto nos invita a recordar como sociedad y  mantener el trabajo por conseguir más autonomía en espacios masculinizados.

El derecho a voto, si bien no lo único, es esencial para trabajar por conseguir que se respeten los derechos de las mujeres. Por lo mismo la conmemoración de los 73 años del voto femenino en Chile es ideal para recordar su valor y seguir defendiéndolo. 

Pero como entendemos que no todas las personas están alineadas con esta importancia desde LideraMujer trabajamos para poner en valor este tipo de temas. Con el objetivo de velar por los derechos de todas las personas, e incorporar la perspectiva de género en diversos espacios.

Un ejemplo de esa labor es el taller en Sensibilización en Perspectiva de Género que realizamos para diversas organizaciones. Recuerda que puedes revisar detalles sobre este y otros talleres en nuestro Portafolio de Talleres, para contribuir en el trabajo por la incorporación de la perspectiva de género en cada uno de los espacios de nuestra vida.