Su objetivo es promover políticas integrales para prevenir, investigar, sancionar y erradicar tanto el acoso sexual, como la violencia y la discriminación de género en la educación superior.
El pasado miércoles 15 de septiembre el Diario Oficial promulgó la ley sobre acoso, violencia y discriminación de género en la educación superior. Cuyo objetivo es promover políticas integrales para prevenir, investigar, sancionar y erradicar el acoso sexual, la violencia y la discriminación de género en la educación superior. Así como también proteger y reparar a las víctimas.
A lo largo de su implementación, esta ley pretende crear espacios seguros sin todos estos tipos de violencias en los espacios de educación superior. Para ello el mecanismo dará el plazo de un año desde la publicación de la ley para que las instituciones implementen los requerimientos.
Cabe destacar que dentro de la misma ley se definen aspectos relevantes a considerar sobre los alcances de la normativa. Uno de ellos es la definición de acoso sexual, que lo define como “cualquier acción o conducta de naturaleza o connotación sexual, sea verbal, no verbal, física, presencial, virtual o telemática, no deseada o no consentida por la persona que la recibe”.
De esta forma cada institución de educación superior deberá tener una política para actuar contra el acoso sexual, la violencia y la discriminación de género. Esto ya no como una opción de cada establecimiento, sino que como un requisito para acceder a la acreditación institucional.
Desde LideraMujer valoramos el avance legislativo que significa la ley sobre acoso, violencia y discriminación de género en la educación superior. Ya que es totalmente necesaria para construir espacios seguros en la educación superior. Al mismo tiempo que pone en boga la importancia de que existan este tipo de mecanismos para prevenir la violencia de género.
